En un cofrecito que al abrirlo brillarán días pasados
Esforzando al futuro.
Son perlas que se engarzaron una a otra
Con manitas que se juntan en una oración.
Nada podrá desunir la fuerte alianza
Con la que se fundó mi hogar,
Donde El Creador levantó nuestra esperanza familiar.
Puestos uno a uno los ladrillos con esfuerzo
De mi compañero mi costado, mientras yo le alcanzaba
Junto a un mate; cemento, arena y cal.
Así juntos, afirmamos nuestro techo
Ante unos ojitos inocentes
Que ahora seguros pueden estar.
Las puertas son de duro roble contra el invasor,
Abiertas para todo aquél de buen corazón.
Ventanas amplías que invitan al sol.
Y un jardín derramado en flores que alegran su interior.
Habitaciones que guardan de cada miembro sus risas,
Llantos, interrogantes - respuestas. La vida
Y la espera de la esencia de un mundo mejor.
María Luz
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